El oso negro ha llegado a
ser tan prolífico y exitoso en su supervivencia como es posible
serlo para los osos. Las dieciocho subespecies conocidas pueden ser
halladas a través de todo Estados Unidos y Canadá. El número
estimado de osos negros en Norteamérica varía, aunque 750,000 es la
cantidad más frecuentemente sugerida. Se piensa que existen más de
7000 de estos animales tan sólo en el estado de Pennsylvania (E.U.)
No obstante su nombre,
existen osos negros en una gran variedad de colores. Hay osos negros
de color marrón, blanco, y hasta uno azulado.
Estimaciones realizadas por
expertos con respecto al peso del oso también parecen variar mucho.
Mediciones conservadoras sitúan el peso promedio de estos animales
en cerca de 150 kilogramos. Sin embargo, el nivel de dimorfismo
sexual exhibido por la especie hace difícil realizar conteos
precisos. El registro del ejemplar más grande de que se tiene
noticia es de un macho muerto en Wisconsin (E.U), que data de 1885.
Su peso fue de aproximadamente 380 kilogramos, bastante mayor del
esperado.
Los osos negros tienen una
dieta amplia y variada. Pueden comer casi cualquier cosa;
típicamente, les encanta la miel, son reponsables de daños a
apiarios estimados en miles de dólares cada año.
Las garras del oso negro
son más cortas y curveadas que las del oso pardo. Esto les da una
gran agilidad para escalar árboles. Frecuentemente una hembra
alentará a sus cachorros a subir a un árbol mientras hay peligro.
El oso negro tiene un modo característico de escalar y descender de
un árbol: Usan mayormente sus garras delanteras para escalar y
sostenerse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario